¿Qué son los vinos orgánicos?

Antes de comenzar aclaremos una duda, los vinos orgánicos no son lo mismo que los vinos biodinámicos. Aunque las reglas para etiquetar un vino como orgánico varían entre países, la definición básica tiene dos condiciones estrella:
Que durante el cultivo del viñedo no se hayan usado herbicidas, pesticidas ni fertilizantes sintéticos, así las uvas y la tierra son protegidas de químicos que intervengan en los procesos naturales.

Que durante la creación del vino sean usados métodos más naturales que garanticen su calidad.

Tres beneficios de los vinos orgánicos que querrás conocer

Elegir vinos orgánicos es apoyar métodos vitivinícolas más amigables con el medio ambiente. La razón quizá más importante para quienes gustan de beber vinos orgánicos es que si amamos lo que nos da la tierra debemos cuidarla para poder continuar disfrutando de todas sus cualidades; es por eso que muchas bodegas alrededor del mundo están comenzado a introducir cada vez más métodos de producción orgánica en sus vinos.

¡Cuidamos más nuestra salud! Además de los beneficios del vino que ya conocemos como el que ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares; los vinos orgánicos poseen más intactas sus propiedades nutritivas como vitamina C y hierro.

¡Adiós al mito sobre su baja calidad! El desconocimiento aún sobre el tema lleva a pensar a mucha gente que “orgánico” puede ser sinónimo de baja calidad; pero esto está muy lejos de la verdad. Para que una bodega pueda poner en su etiqueta el nombre orgánico, sus vinos deben haber cumplido diferentes requerimientos de calidad. De hecho, algunos procesos como el uso de fertilizantes no químicos ayudan a que la naturaleza se exprese con mayor vivacidad a través del vino, algunos de ellos pueden darnos la sensación de ser más frescos y sabrosos en boca, ¿quieres probarlo tu mismo?

Nuna Tetrada / Vino Orgánico

La gran región vitícola de Mendoza se extiende a lo largo de los paralelos 22° y 42° sur.  Se extiende a lo largo de la Cordillera de los Andes, desde la provincia de Salta hasta la provincia de Rio Negro. Son más de 2,400 kilómetros de extensión con una gran variedad de suelos y climas que hacen de cada región un terruño único.

En general, todas las regiones vitícolas de Mendoza son secas y áridas, con bajo nivel de humedad, por lo que requiere el riego. Sus suelos suelen ser profundos y permeables, pobres en materia orgánica. Sin duda alguna, todos estos factores hacen de Argentina, y en especial, la región de Mendoza, todo un oasis vitícola.

Esta inmensa zona es la más importante en la producción de vinos finos, ya que representa más de un 60% del total de la producción nacional.

Las principales regiones vitícolas en Mendoza son: Luján de Cuyo, Agrelo, Valle de Uco y San Rafael.

Son muy diversas las variedades de uva que se cultivan en la zona, pero de las más importantes para los vinos tintos son: Malbec, Bonarda, Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah. Para los vinos blancos: Chardonnay, Riesling, Sauvignon Blanc y en especial, la Torrontés.

En el Valle del río Uco, en Luján de Cuyo, se localiza la bodega Chakana, nombre que adoptó en reconocimiento a los pueblos andinos que dependían en su totalidad de la naturaleza para su subsistencia.

Dieron una trascendental importancia al conocimiento astronómico, del cual establecieron un orden y una organización social de tipo agrícola en equilibrio sustentante. Y así, entre el 2 y 3 de mayo, cuando la Cruz Chakana asume su posición vertical, los indígenas celebran el nacimiento de un nuevo ciclo agrícola.

Nuna significa “Espíritu de la Tierra” y es el nombre que representa la visión de la agricultura para el futuro. A través de la búsqueda de una manera más auténtica y natural de hacer vino promueven la integración entre el ser humano, el suelo y el mundo biológico del que participamos.

Basados en el estudio y la comprensión de los terruños, producen vinos que expresan la identidad y el carácter de los suelos de Mendoza.

Conoce Nuna Tetrada y descubre la propuesta de vinos orgánicos y biodinámicos.