Ya sea por una fiesta de cumpleaños, una cena romántica o un encuentro entre amigos, a menudo nos enfrentamos al reto de saber elegir bien un vino. Elegir una botella de vino o pedir vino en un restaurante parecería ser un proceso simple pero a menudo no lo es. Más allá de la pregunta básica de tinto o blanco, tienes que elegir el tipo de uva, el nivel de crianza y la región del vino. También tienes que tomar en cuenta el precio que estas dispuesto a pagar.
Seguramente a muchos de nosotros nos ha pasado que al pararte ante a los anaqueles de una tienda de vinos o al leer la carta de vinos de un prestigioso restaurante, te enfrentas a la abrumadora experiencia de encontrarte ante cientos de etiquetas con nombres y conceptos raros, muchas veces en otros idiomas y que hacen que parezcan todos lo mismo. La única diferencias notable que logramos identificar es el precio. Mientras unos cuestan en el orden de $100 pesos, hay otros que llegan a costar hasta 10 veces más, y en realidad no tenemos ni idea del porque. Es por ello que el principal obstáculo al que debemos enfrentarnos cuando somos principiantes, es hacer una buena elección.
1)Vinos especiales para cada momento
Primero que nada debemos de partir de saber que “hay vinos especiales para cada momento” y basta con hacerse las preguntas adecuadas para saber escoger el mejor: ¿Qué vino quiero? ¿Blanco, tinto o rosado? Elegiremos en función de la ocasión y de la época del año. Por ejemplo, los vinos de verano, por lo general, son blancos y rosados para acompañar mariscos y pescados. Ahora bien, si vamos a acompañar una tradicional carne asada o algún corte de carne roja, siempre vendrá bien un buen tinto.
2) Procura leer la etiqueta
Procura leer la etiqueta para obtener ideas sobre el sabor, el cuerpo y los maridajes potenciales del vino. La mayoría de las personas compra vinos con base en etiquetas que les gusten pero puedes profundizar aún más si lees la descripción del vinicultor. Con frecuencia, principalmente en los vinos provenientes de los países conocidos como “nuevo mundo”, las etiquetas y contra etiquetas señalan los sabores prominentes y el carácter del vino y a veces sugieren maridajes de comida.
3) Considera el año
Considera el año cuando elijas un vino. Todos los vinos cambian, se desarrollan y evolucionan con la edad y hay algunos rasgos comunes que todos los vinos adoptan a medida que se añejan, como los siguientes:
- Si buscas vinos ligeros, refrescantes y fáciles de beber, apunta a las botellas más jóvenes. Los vinos tienden a perder sus cualidades afrutadas con la edad.
- Los vinos más densos y complejos normalmente tienen que añejarse durante unos años en barricas para desarrollar mejor sus características. De cualquier forma, si no quieres errar, considera no más de 3 años para el caso de vinos blancos o rosados y no mas de 6 años en el caso de vinos tintos. Los vinos clasificados como “Reserva” o “Gran Reserva”, pueden aguantar un poco más tiempo de añejamiento en botella. En estos casos puedes considerar vinos de cosechas de hasta 10 años.
4) Investiga un poco
Considera usar calificaciones de vinos para ayudarte a elegir las botellas más costosas. Si intentas impresionar, puede ser mejor investigar un poco antes de gastar. Los sitios web y las revistas como Wine Spectator, Food & Wine y Wine Enthusiast, ofrecen rankings y críticas de muchos de los vinos que encontramos en el mercado, lo que te permite ver rápida y fácilmente si un vino realmente vale su precio.
5) No dudes en preguntar
Pídele al mesero o al personal de la tienda recomendaciones para ayudar a guiarte. El mesero de un restaurante debe poder ofrecer sugerencias para ayudarte a elegir un vino que complemente tu comida y debe estar informado sobre los vinos que el restaurante ofrezca y las comidas con las que mariden bien. Asimismo podemos ayudarte a seleccionar un vino por medio de nuestro chat en línea, hacerte recomendaciones con base en tu rango de precios, ocasión o aquello con lo que planees maridar.
Finalmente, confía en tus instintos y conoce lo que te gusta. Tomar notas sobre los vinos que pruebes, incluyendo la marca, el año y los sabores, es una gran forma de empezar a aprender más sobre el vino.